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Tus preguntas sobre los Santos

Del culto a las imágenes, precisiones.

Del culto a las imágenes, precisiones.

Hola Ramón: Acabo de leer el artículo la respuesta que le das a uno de tus lectores que critica el culto a las imágenes.  Si es posible y me lo permites, me gustaría agregar algunos detalles o si lo deseas puedes incluirlos en tus respuestas.

1. Entre las críticas más grandes que tuvo la Iglesia durante el movimiento de la Reforma Protestante en el S. XVI, se encontraba la riqueza de los templos y de los objetos de culto. Sin embargo, el templo que más ha agradado a Dios, de acuerdo a la Biblia, es el de Salomón en el que según el mismo texto había: incontables imágenes de querubines que incluso debían ser colocadas a los lados del "Santísimo", cubriéndolo con sus alas abiertas: (1 Re 6,23-35; 7,29,36; 8,6-7 y 2o. Cro 3,7-14; 5,7-8).

Este mismo templo, según la Biblia, estaba construido de maderas preciosas, como la acacia y el cedro de Líbano cubiertos de oro, guirnaldas y flores.  Nos dice la Biblia que el mismo día de la dedicación del Templo Yahweh prometió tenerlo siempre ante sus ojos y en su corazón, y oír las plegarias que se hicieran ante él en ese lugar.  (1,Re 8,10-11; 9,3 y 2o.Cro 7,11-16).

Esta Arca de la Alianza con querubines era llevada en hombros de los sumos sacerdotes de la tribu de Leví, de campamento en campamento, durante los cuarenta años que tardaron en llegar a la Tierra Prometida (Ex. 25, 13-15).  Los católicos seguimos esta tradición y llevamos en hombros las imágenes de Dios y su Madre. Para los antiguos el Arca de la Alianza era la imagen y la presencia de Dios (en la imagen, una "réplica" en el Museo George Washington).

2. Sobre los objetos que se utilizan en el culto y la vestimenta sacerdotal, basta leer la biblia en la parte en la que Dios le manda a Moisés cómo quiere que sean los objetos con los que se le adora; le manda usar madera de acacia y oro. Manda hacer un candelero de 7 brazos con flores de almendra; le pide que los sacerdotes vistan ropajes de púrpura y lino; que usen piedras preciosas y un báculo con la imagen de una serpiente, todo de metales y maderas preciosas. La tienda que tenía en su interior el Arca de la Alianza debía tener ricos cortinajes bordados con oro.  Pide también que los vasos para el culto y los altares o mesas se construyan de la misma manera. (Ex 25, 18-22, 37,7-9). O sea que...

3. Vale la pena agregar que fue Dios quien hizo la primera imagen suya, a su imagen y semejanza, creando al hombre. (Gen. 26-27)

4. Por si hace falta alguna otra explicación me parece importante agregar que los católicos no adoramos a las imágenes, únicamente las veneramos como objetos que representan la divinidad.  Todos sabemos que Cristo o la Virgen no están en esos objetos, pero nos los recuerdan, de la misma forma en la que una madre le da un beso a una fotografía del hijo que tiene lejos, ella sabe que ese objeto no es su hijo: pero es una forma de recordarlo.  Amándolo tanto buscará un marco de la mejor calidad para colocar su imagen y seguramente la colocará en un lugar importante en la casa, donde todos puedan verlo y a nadie le ofende que mantenga cerca un florero, con flores frescas.

5. Me gustaría explicarle a tu lector que en los siglos VII y VIII hubo en la iglesia movimientos iconoclastas, o sea que destruían las imágenes de veneración. Cuando el papa San Gregorio Magno tuvo conocimiento de esto, le comentó al obispo que lo llevaba a cabo que lo felicitaba por evitar la adoración a las imágenes, ya que la adoración se le debía únicamente a Dios, pero que lo que había hecho no era correcto porque las imágenes eran los libros de los ignorantes y lo que los letrados leían en las escrituras, los faltos de educación lo encontraban en las pinturas, esculturas y objetos de orfebrería; razón por la cual no era correcto que rompiera las imágenes y las arrojara al mar. Durante la Contrarreforma (a partir del S. XVI) se consideró que las imágenes tenían gran importancia pedagógica y es por ello que se cuidaba cada uno de sus detalles para evitar que dieran un mensaje equivocado a los fieles.

Coralia Anchisi de Rodríguez

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