La Enrama de San Antonio
El pueblo de San Antonio de los Naranjos (actual ciudad y municipio de Cárdenas), ubicado en el estado de Tabasco en el sureste de México, fue fundado hacía el siglo XVIII por una donación de tierras hecha por el presbítero José Eduardo de Cárdenas y Romero, párroco del pueblo de Cunduacán y representante por la provincia ante las cortes de Cádiz, con el patronato como lo testifica su primitivo nombre de San Antonio de Padua.
Esta ciudad es escenario hasta la actualidad de una de las devociones populares más arraigadas en la población rural tabasqueña, la enrama de San Antonio, aunque la enrama se practica en la mayoría de los municipios y comunidades rurales de Tabasco y en los demás estados suceden actos muy similares alrededor de las fiestas patronales, cada uno tiene su matiz propio y es el caso de la enrama de San Antonio. Es una de las más famosas, junto con la de San Isidro en el municipio de Comalcalco. Días antes de la festividad del Santo, a veces el día anterior, algunas otras el mismo día de la fiesta del patrón, todas las comunidades del municipio se reúnen para presentar ante San Antonio animales vivos. Muchos donan ganado, los cuales posteriormente se venden o se cocinan para ayudar a la manutención de la parroquia. Otros, los más pobres, llevan lo que cultivan: maíz, caña, plátano, cacao, etc; en una enorme procesión que recorre las calles principales alrededor de la parroquia de San Antonio donde va presidiendo la imagen del Santo (de vestir y la más antigua de la iglesia, solo sale para su fiesta). Muchos hombres y mujeres van ataviados con el traje regional entre cánticos y oraciones. No sólo se lleva a cabo esta procesión, sino que también desfilan los taxistas y los propietarios de transporte público, así como diversas comunidades, puesto que San Antonio es de los santos más populares, siendo patrón de tres municipios.
La enrama tiene su origen prehispánico como la mayoría de las fiestas mexicanas que perduran hasta el día de hoy: ya fray Diego de Landa escribe sobre actos similares que se llevaban a cabo entre los mayas (cabe destacar que la región de Tabasco forma parte del área maya, específicamente de los maya-chontales), según nos dice Landa, durante las fiestas de sus dioses se acostumbraba sacar la imagen del dios y se le adornaba con guirnaldas de flores y ramas con hojas y se le ponía una tela a modo de falda. De esta acción de adornar al dios con flores y ramas viene el nombre de “enrama”, los mayas llevaban en la fiesta del dios toda su producción de alimentos, maíz, cacao, el famoso chorote (bebida a base de maíz y cacao), y animales vivos, algunos cocinados y otras los daban en sacrificios en honor al dios (en otras ocasiones eran jóvenes los que eran sacrificados). Algo similar a lo actual, pues ya no se sacrifican humanos o animales, pero se hace la misa que es el recuerdo del sacrificio de Cristo por nosotros. Todos los productos son bendecidos por el sacerdote y después que la imagen del Santo entra en la iglesia toda la gente hace lo mismo, dispuesta para participar en este nuevo sacrificio, pedir por intercesión de San Antonio que haya buenas cosechas y que les vaya bien en los negocios, muy similar a la creencia prehispánica.
Durante la persecución religiosa en Tabasco a manos del gobernador Tomás Garrido Canabal, se cerraron todos los templos y para tratar de acabar con estas fiestas “de fanatismo y vicio” como diría el señor Garrido, se comenzaron a imponer las ferias regionales donde se exponían los productos producidos en el municipio y se hacia una exposición ganadera, tratando con esto de acabar con las fiestas patronales, puesto que se hacían en el margen de la celebración del santo patrón de cada localidad, así como en la ciudad se hacía durante Semana Santa. En dichas ferias se ridiculizaba a Cristo y a los Santos, se nombraba a una vaca o un burro con el nombre del Papa o el Obispo en turno y se hacía mofa de ellos, de los sacerdotes y de la misa. En cada una de estas ferias no podía faltar la incineración de imágenes religiosas, en las que, por lo general, terminaba hecho cenizas el santo patrón del pueblo, si no había podido ser escondido. En el caso del pueblo de Cárdenas se organizó la feria "de la caña" y la elección de la flor de la caña alrededor del 13 de junio, para malestar del ex gobernador Garrido.
Al día de hoy aunque la feria de la caña se sigue realizando, ha quedado en completa relación a la celebración de San Antonio de Padua, al grado que se le conoce más como la feria de San Antonio, que la feria de la caña.
Hoy se puede apreciar alrededor del 13 de junio como la imagen de San Antonio es venerada por su pueblo y especialmente por las mujeres que llenan de nudos el cordón del santo franciscano esperando a que este año si se les haga vestirse de blanco y estar ante el altar, otros llenan de besos los pies del mismo o al Niño Jesús que porta en sus brazos. Para desgracia en la ciudad capital del estado la tradición ha desaparecido pero en los municipios y en las localidades rurales aún sigue persistiendo esta hermosa tradición de la enrama a los santos patrones.
André Efrén Ordóñez Capetillo.
5 comentarios
Lic. Eddy L. González J. -
Nos Carlos Emilio Berlie Belaunzarán por la Gracia de Dios y de la Santa Sede Apostólica Arzobispo de Yucatán. Al muy ilustre deán y cabildo, venerable clero y fieles de la arquidiócesis. Hermanos obispos de la provincia eclesiástica yucateca.
XII. Las festividades de nuestra amada iglesia valoran y atesoran el gran misterio de Dios, lo celebran y viven de manera majestuosa, el pueblo a través de sus vivencias y tradiciones acrecientan más el culto a Nuestro Señor, por ello las festividades deben ser estudiadas, organizadas y promovidas por nuestro magisterio, defendidas por nuestros hijos espirituales y transmitidas según la Palabra de Dios por medio de la Iglesia católica. Estas festividades son:
g) Enramas: de un significado pagano de "ofrecer", a un significado cristiano de "ofrendar", la enrama es el ofrendar el espíritu, nuestra alma, nuestro ser y sacrificio a Dios, cuyo símbolo son los elementos materiales frutos del esfuerzo del hombre y su trabajo.
Dado en el palacio episcopal de Mérida de Yucatán a los veinticinco día del mes de mayo del año de la Encarnación de Nuestro Señor 2008. + Carlos Emilio, Arzobispo de Yucatán
Mons. Berlie le da una razón espiritual, una observación tal vez contraria, es el ofrecer al propio hombre (su trabajo, su esfuerzo, su sacrificio) a Dios por medio de las obras materiales y no al revés. Opiniones de cada quién. Saludos a todos... felicidades reiteradas amigo mio...
Lic. Eddy L. González J., historiador
EL AUTOR DEL BLOG -
Tampoco dice que sea "la más famosa", sino "una de las más famosas", por ende, André deja claro que hay otras que lo son.
André -
Maruxela -
yeifuffn -
Se les llama "enramas" no por la referencia a los dioses prehipanicos (esa explicación está forzada), sino porque las ofrendas frutales y las aves se ataban en ramas de arbol (es decir, se "enramaban") y así se llevaban en procesión hacia la iglesia. Ahora las llevan atadas a las redilas de las camionetas.
En Tabasco México la más famosa no es la de Cárdenas, sino la de Comalcalco, donde el santo patrono es Isidro el labrador, aunque está llegó a convertirse en una cantina pública, pues durante la procesión se bebe cervezas y hay musica profana.
Junto con la de Cárdena una muy famosa es la de Nuestra Señora en el templo de San Francisco en Jalpa de Méndez Tabasco, que cada año en el mes de mayo sale en procesión junto con sus ofrendas y recibe cerca de 100 vacas y toros, además de frutas y aves. Gracias a tanta generosidad han construido un nuevo templo con bellos vitrales y pinturas murales de Agustin Cardenas, quien es un famoso pintor mexicano de temas religiosos (fue alumno de Diego Rivera).